“DIA DEL NIÑO”
Con la intención de homenajear a los niños en su día, nuestro colegio efectuó una donación de útiles escolares. Los beneficiarios fueron los niños que concurren a un centro de día de Arequito, localidad de la 2da circunscripción donde varios colegas ejercen la profesión. Fue muy grato acercarnos a los mismos en tan importante ocasión, lo cual permite conocer y compartir una de las diversas experiencias de las tantas que se llevan a cabo en nuestra provincia. Felicitamos a los matriculados que honran con su tarea el compromiso profesional.
El Centro de Día “Rayito de Sol” funciona hace diecisiete años perteneciendo a la Comuna de Arequito y se trata de un espacio de educación no formal. Durante muchos años la institución cumplió con la función de satisfacer las necesidades básicas del niño. Es por esto que su principal objetivo fue el baño y la higiene, la alimentación a través de la copa de leche y realización de tareas. Durante varios años estas funciones se desempeñaron en el SAMCo de la localidad, luego en propiedades alquiladas. Pero alrededor de diez años atrás se llevó a cabo la construcción de su edificio propio.
Hoy en día la función del Centro ha sufrido modificaciones gracias al mejoramiento de las condiciones de vida de la población, donde cada familia dispone de un techo propio, con posibilidades de acceder a todos los servicios necesarios para una vida digna. Son pocos los niños que no cuentan con un baño en condiciones o no tienen qué comer, y esto permitió que el enfoque del trabajo esté puesto en brindarles un mejor espacio, acorde a sus necesidades. De esta manera, nuestro enfoque se ha movido hacia un trabajo centrado en el aprendizaje visto desde sus múltiples perspectivas. Como psicopedagogas consideramos fundamental abordarlo no solo desde lo escolar sino también poniendo el acento en lo social- cultural. Desde este posicionamiento apostamos a crear un espacio en el que se realizan talleres de diversa índole, como ser la realización de tareas, taller de lectoescritura, taller de folclore que incluye bailes, comidas y tradiciones típicas de cada región de nuestro país. Sin dudas esta labor se ve acompañada por diversas personas que hacen posible el funcionamiento de este espacio de trabajo como ser docentes, profesora de folclore y celadoras. En simultáneo y con frecuencia semanal realizamos el taller psicopedagógico enfocado al trabajo de los vínculos entre compañeros que se verá reflejado en su accionar ciudadano. Desde este espacio se han impulsado campañas de concientización hacia la comunidad, entre ellas, cuidado del medio ambiente, reciclado, violencia en el fútbol, pintado de murales.
Trabajar en espacios como éste nos permitió ver cómo la psicopedagogía atraviesa la frontera de lo escolar, llegando a construir vínculos fundamentales en la vida de un niño. El trabajo comunitario nos enseña a ver la belleza en las pequeñas cosas de la vida y que un abrazo dado a tiempo puede enseñarnos mucho más que una letra o un número.
Sigamos abriendo espacios…
Candela Audissio y Juliana Dichiara- Licenciadas en Psicopedagogía.
